Hans Makart: El mago de los colores

 
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Hans Makart

Nació el 28 de mayo de 1840 en Salzburgo, Austria.
Pintor academista sobre todo de temas históricos, fue también diseñador y decorador.
Debe su fama sobre todo a la influencia que ejerció sobre Gustav Klimt, de quien se dijo, le idolatró, al igual que otros pintores austriacos, aunque ya en su tiempo era una celebridad en Viena. por sus dotes de artista y su elevada cultura.

Fue conocido como “El mago de los colores”, estos eran brillantes, aplicados sobre formas fluidas, tonalidades a las que para dotarlas de fuerza, utilizó asfalto, sustancia que ha ocasionado el deterioro de algunas de sus obras con el paso de los años.
Como otros pintores de su época, la temática más frecuente en sus cuadros fueron las alegorías, la historia y el retrato.

Se le consideró el rival austriaco del francés William-Adolphe Bouguereau.
Hijo de un tesorero en el Palacio Mirabell, nació en la residencia de dicho palacio, residencia de los arzobispos de Salzburgo.
Practico el esteticismo academicista, y determinó la cultura de toda una época en su país, estilo que no se conocía y que no ha sido replicado a día de hoy. Su dibujo, claro y preciso, y su erudición en el trato de las imágenes fueron muy estimados.

Estudió inicialmente en Academia de Viena entre 1850 y 1851, en la que tuvo como maestro a Johann Fischbach.
A la vez que estudiaba en la Academia, respetando escrupulosamente las reglas del clasicismo, fue un gran intelectual y académico.

Sin embargo no era buen dibujante, él sobre todo era un apasionado del color y la sensualidad, incapaz de adaptarse a las rutinas de las clases de dibujo, sus maestros que le creyeron carente de talento, le instaron a abandonar la Academia.

Tras este forzoso abandono de los estudios oficiales en Viena, viajó a Múnich, y tras más de estudiar de forma independiente, captó la atención de Karl Theodor von Piloty, y su influencia determinó su definitivo estilo.

Durante estos años viajó a Londres, París y Roma para ampliar sus conocimientos. El primer cuadro que que pintó con la dirección Piloty, “Lavoisier en prisión”, aunque se consideró algo convencional, atrajo ya la atención por su sentido de color.
Su siguiente trabajo, “El caballero y los ninfas de agua”, mostró por primera vez las cualidades decorativas que poseía y que ya serían una constante en toda su obras.

Su fama se afianzó el año siguiente, con dos obras, “Amoretti moderno” y “La plaga en Florencia”. Su pintura “Romeo y Julieta” fue comprada por el emperador austriaco para el Museo de Viena, y Makart fue solicitado por la aristocracia vienesa.

El príncipe Von Hohenlohe proveyó Makart, le donó una antigua fundición en el Gusshausstraße, para que en ella instalara un estudio. Lugar que poco a poco él convirtió en un lugar impresionante lleno de esculturas, flores, instrumentos musicales, adornos de todo tipo y joyas, que utilizaba para crear escenarios clásicos en los que encuadrar sus retratos, principalmente de mujeres.

En ocasiones su estudio se convertía en un salón y un punto de reunión de la alta sociedad social en Viena. Cósima Wagner lo describió como una maravilla, llena de belleza, “un trastero” sublime. Su lujoso estudio también sirvió como un modelo para muchos otros salones de las clases medias y altas.

El artista hizo de mediador entre distintos niveles de la sociedad, creando una ambiente. de alguna forma ambiguo, socialmente, en la que la nobleza y burguesía podían unirse gracias a la veneración que profesaban al maestro.

“La entrada de Carlos V en Antwerp” causó fuertes controversias, porque Carlos V aparecía llegando en una procesión rodeado por vírgenes desnudas; la ofensa fue la idea errónea de que los desnudos no tenían lugar en una escena actual.. En los Estados Unidos, la pintura cayó bajo la tutela de Anthony Comstock, que aseguró la fama de Makart en aquel país.

En 1882, el Emperador Francisco José I, que estaba construyendo Villa Hermes en Lainz, cerca de Viena, para su emperatriz, especificando que la decoración del dormitorio real fuera inspirado en “El sueño de una noche de verano” de William Shakespeare. Makart diseñó para él un mundo de sueños fascinante que todavía existe en la Villa Hermes como una gran pintura.

Fue gran amigo del compositor Richard Wagner, pudiendo considerarse que los dos desarrollaron los mismo conceptos y tendencias estilísticas en sus diferentes formas artísticas.

Además de las obras citadas, sobresalen entre su producción: “Catherina Camaro”, “La caza de Diana”, “Abundantia”, “Primavera”, “Verano”, “La Muerte de Cleopatra”,”Los Cinco Sentidos” y “Bacchus y Ariadna”.
Murió tempranamente, en Viena, el 3 de octubre de 1884.

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