Giulio Romano: Alto Renacimiento en la Escuela de Roma

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Giulio Romano

Giulio Pippi di Pietro de Gianuzzi nació en Roma hacia 1499.
Arquitecto y decorador además de pintor, fue uno de los más brillantes alumnos de Rafael Sanzio, de hecho colaboró con él en varias obras, algunas de ellas se pueden ver en el Museo del Prado de Madrid, “La Sagrada Familia del roble”, entre otras.

Fue además heredero de una parte importante de sus bienes: entre ellos sus mejores obras y está considerado como su sucesor en la llamada Escuela de Roma.

Fue un innovador dentro del clasicismo del Alto Renacimiento e iniciador del manierismo.
Entro muy joven como aprendiz en el taller de Sanzio, trabajando en numerosos frescos de las galerías vaticanas y algunas estancias papales, previamente diseñadas por el maestro. Igualmente participó en los cielorrasos de la Villa de los Farnesio.

A la muerte de Rafael, acaecida en 1520, terminó los frescos sobre la vida de Constantino en el Vaticano, y varias inconclusas de este, entre ellas “La Coronación de la Virgen” y “Transfiguración de Jesús”, ambos en el Museo Vaticano.
Decoró un buen con sus frescos y buen número de villas romanas y algunas obras arquitectónicas.

Tras el saqueo de Roma en 1527, y la muerte de León X, el mecenazgo que sostenía a Romano disminuye. Según el pintor e historiador de arte Giorgio Vasari, Baldassare Castiglione enviado por Federico II Gonzaga le encarga a Romano la realización de algunos proyectos de arquitectura y pinturas para el Ducado de Mantua, encargo que Romano aceptó, desarrollando el resto de su carrera en la ciudad ducal.

Es en Mantua donde realiza su obra maestra de arquitectura y sus famosos frescos ilusionistas, entre 1525 y 1534, en la residencia de verano los duques: El Palazzo Té.

Ayudó así mismo a reconstruir el palacio ducal, la catedral y diseñó la iglesia de San Benedicto. Varios sectores hasta entonces inundables en Mantua se desecaron bajo su dirección. Siempre gozó del apoyo y la amistad del duque, consta en algunos documentos que cobraba más de 1000 ducados al año.

Su estudio se convirtió en una escuela de arte muy famosa en toda Italia.
Diseñó algunos tapices y álbum erótico “I Modi”, que fue posteriormente fue grabado por Marcantonio Raimondi, quien por esta causa fue encarcelado en Roma acusado de atentar contra la moral de la época.

Murió en Mantua, el 1 de noviembre de 1546, cuando acababa de ser nombrado arquitecto de la Basílica de San Pedro de Roma.
Su obra está representada en los más importantes museos del mundo, además de los italianos, se pueden encontrar en L’Hermitage de San Petersburgo, el Museo del Louvre de París y el Museo del Prado de Madrid.

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