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Helena Schjerfbeck
Nació en Helsinki , Finlandia, el 10 de julio de 1862.Una lesión en la cadera, cuando solo contaba con cuatro años de edad, marcaron el resto de su vida.
Se formó inicialmente en la Escuela de la Sociedad Finlandesa de Arte hasta 1873, y más tarde en la Academia de Adolf von Becker, en Helsinki, de 1877 a 1878.
En 1880 viajó a París para ampliar sus estudios junto a Helena Westermarck.
En la capital francesa recibió clases de Léon Bonnat, y asistió a la Academia de Madame Trélat de Vigny, y a más tarde a la Académie Colarossi.
Su primera obra importante fue: “Soldado herido en la nieve”, de 1880, que compró la Sociedad Finlandesa de Arte.
Después vinieron: “Muchacho dando de comer a su hermanita”, actualmente en el Ateneum, Helsinki, obra que fue admitida en el Salón de París. Se trata de una pintura de estilo absolutamente naturalista.
En 1884 presentó en el Salón: “Funeral en Bretaña”, actualmente en el Museo Pojanmaan de Vaasa.
Sin embargo sus obras más originales, son más espontáneas e impresionistas, como “La puerta”.
Comenzó a madurar su estilo modernista, concentrándose en simplificar la expresión a lo esencial.
La mordacidad de sus autorretratos cuando rondaba los ochenta años de edad, los hace únicos en la historia del arte.
Desarrolló de forma consecuente su enfoque pictórico, como podemos apreciar en sus bodegones coloristas.
Sin embargo, su gran pasión siguió siendo pintar al prójimo, su espíritu y su carácter.
Es una de las artistas más famosas de Finlandia.
Hacía 1890 impartió clases en Helsinki, pintando poco en esa época.
En 1902 ella y su madre se mudaron a la ciudad de Hyvinkää.
Se la ha comparado con artistas de la talla de James McNeill Whistler y Edvard Munch, sin embargo a partir de 1905, sus pinturas cobraron un estilo claramente indentificable.
En 1913 fue redescubierta por Gösta Stenman, cosechando una vez más un enorme éxito en exposiciones itinerantes.
Pasados los años cada vez viajaba menos, sólo de vez en cuando, por algún asunto familiar.
Residió en un hogar de ancianos, durante menos de un año antes de ingresar en el sanatorio Luontola.
Dos años más tarde, en 1944, se mudó a la Saltsjöbaden, donde vivió hasta su muerte el 23 de enero de 1946.
Su trabajo comienza de una forma deslumbrante para los expertos, con una visión un tanto melancólica de los finales del siglo XIX, su realismo académico inicial, termina con imágenes destiladas, casi abstractas, en el que se llevan a cabo la pintura pura y la descripción críptica en perfecto equilibrio. (Roberta Smith, del New York Times, 27 de noviembre de 1992)
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