Abrid los ojos hacia vosotros mismos y mirad en el infinito del espacio y el tiempo. Oireis que alli vuelven a resonar el canto de los astros, la voz de los numeros y la armonia de las esferas. Cada sol es un pensamiento de dios y cada planeta una forma de ese pensamiento, y es para conocer el pensamiento divino que vosotras almas descendereis y remontareis penosamente el camino de los siete planetas y de los siete cielos suyos.
HERMES TRISMEGISTO
Lo que la oruga ve como el final de la vida, el maestro lo llama una mariposa. RICHARD BACH
DEDICATORIA
Allí, donde habitan las mariposas, lo hacen tambien las hadas y los angeles, la verdad y la ilusion, la alegria, el amor, la dulzura y la fantasia; los mas bellos sueños y la esperanza.
Es el lugar donde los rios son de miel y las montañas de plata y diamantes; donde los seres alados bailan moviendose al ritmo de la musica de George Harrison y el aroma del Padmini; donde puedo descansar en grandes almohadones de plumas tejidos con hilos de seda y oro. Es mi refugio, y el de muchos que sueñan encontrarlo, sin saber aún que son mariposas.
Este blog esta dedicado a todos ellos y ojala puedan disfrutarlo como parte de su camino hacia el lugar donde habitaron o habitaran algun dia
Si nos sumergimos en las profundidades
del Antiguo Egipto, encontraremos a un personaje que cambió
radicalmente a la sociedad egipcia y, sin embargo, es un tanto
desconocido. Su figura me ha apasionado desde siempre, a pesar de que no
conocemos mucho sobre él. No obstante, gracias a su trabajo, Egipto
paso de construir pequeñas edificaciones en adobe y, a veces, piedra a
levantar inmensos monumentos. Estamos hablando, por supuesto, de
Imhotep.
Su nombre significa “el que viene en paz”
e independientemente de la cantidad de cargos que tuviera: sumo
sacerdote de Heliópolis, tesorero del rey-faraón, chaty (algo parecido a
primer ministro) del faraón, astrónomo, arquitecto y médico, fue un
sabio. Es decir, un Leonardo da Vinci del antiguo Egipto, que ha pasado
sin pena ni gloria en los libros de texto.
Pero los antiguos egipcios si le
reconocían su valía, hasta tal punto que lo convirtieron en dios y
peregrinaban al complejo arquitectónico de Saqqara, para donar sus
ofrendas y pedir que sanara a los enfermos. Especialmente en la época
ptolemaica.
La pirámide escalonada
Su gran obra, la primera pirámide de la
historia. En contraposición con las pirámides posteriores de la IV
dinastía, esta está realizada con bloques pequeños con lo que evitaron
los problemas de transporte. Empezó siendo una mastaba la cual se fue
agrandado hasta alcanzar seis grandes escalones con una altura total de
unos 60 metros.
No sabemos que le llevó a modificar la
mastaba primigénia para ampliarla en altura, hay quienes piensan que el
muro que rodeaba al recinto impedía su visión desde fuera. Personalmente
no creo que un genio como él no previera este problema. Quizás
simplemente estaba sujeto a los caprichos del rey y tuvo que modificarla
por órdenes de éste.
El rey Zoser lo tenía en alta estima. Una
prueba es el siguiente hallazgo, corría el año 1926, en el transcurso
de una excavación apareció una estatua del faraón Zoser, con el nombre
de Imhotep en la peana de la misma:
Canciller del rey en el Bajo Egipto, Primero después del
Rey, Administrador del Gran Palacio, Noble Heredero, Gran Sacerdote de
Heliópolis, Carpintero, Escultor y Fabricante de vasijas de piedra”.
Inscripción de l Estatua de Zoser
Con este detalle entendemos lo siguiente:
si el faraón estaba asimilado a un dios en la tierra, y sus estatuas
eran un reflejo de él donde entraba el “ka” del mismo, el hecho de que
el nombre de Imhotep aparezca en una de ellas es un símbolo de su
grandeza sin igual en la historia. ¿Qué hizo este hombre para merecer
tal mérito?
En el Imperio Medio, más de 500 años
después de su muerte, los escribas antes de disponerse a escribir
cualquier texto sobre el papiro hacían el siguiente rito: derramaban
unas gotas de agua de su paleta de colores, a modo de libación, en honor
del sabio Imhotep. Imhotep todavía permanecía en la mente de los
egipcios.
Sabemos que entre sus obras destacaban los “textos sapienciales”,
textos filosóficos sobre la vida que se han perdido. Solo sabemos de
ellos a través de referencias, pero podemos imaginar que pudieran ser
parecidos a las máximas de Ptahotep o las instrucciones de Sesostris.
Sus obras de medicina
La medicina en el antiguo Egipto era una
mezcla mágico-religiosa que la mayoría de las veces no obtenía ningún
resultado beneficioso para el enfermo. La mayorías de los tratados que
nos encontramos son de esta índole.
Sin embargo, en el papiro denominado
Edwin Smith, atribuido originalmente a Imhotep, aunque se cree que
pudieron participar más médicos, se detallan 48 casos clínicos de
heridas de guerra sin ningún tipo de cura mágica (excepto 1 de ellos)
con diagnósticos médicos con un enfoque racional. Lo más sorprendente en
este papiro es el uso de opiáceos como anestesia y algunas prácticas
quirúrgicas. Los pasos utilizados en la medicina egipcia son similares a
los actuales: 1) Síntomas: 2) Diagnóstico 3) Veredicto 4) Tratamiento
Según un grabado de una losa sepulcral en
Saqqara, Imhotep preconizaba la aplicación de presión en las arterias
carótidas para calmar el dolor de cabeza, al disminuir el flujo de
sangre al cerebro. Imhotep afirmaba que el pulso era un índice del
corazón y de las condiciones del enfermo. (nota de Juan Surós Batlló,
Juan Surós Forns. Semiología médica y técnica exploratoria)
¿Deberían los médicos hacer el juramento Imhotépico en vez del hipocrático?
El enigma de su tumba
La tumba de Imhotep jamás ha sido
encontrada. Se han realizado numerosas campañas para tal efecto, pero
los resultados han sido totalmente infructuosos. La imaginación vuela
soñando con la cantidad de tesoros y escritos que debe contener la tumba
de este genio. ¿Estará enterrado en Saqqara? Probablemente, pero hasta
ahora solo tenemos suposiciones. Como dice Nacho Ares: su descubrimiento
sería incluso más grande que el de la tumba de Tutankamon aunque, lo
más probable, es que si se encuentra, se halle saqueada.
¿El José de la Biblia?
Cerca de Asuán, se encontró una estela grabada en una roca de granito. Esta estela se conoce como la Estela del Hambre
y en ella nos cuentan que Egipto se encontraba en un periodo de sequía y
hambruna. Dice Zoser en la misma estela: “En un período de siete años,
el grano ha sido escaso, y lo poco que había se secó”.
El caos reinaba por doquier y el faraón
estaba desesperado. Por ello mandó a buscar a Imhotep, desesperado para
obtener su consejo. Imhotep le puso en contacto con el dios Jnum, el
cual le dice que se van a acabar los SIETE años de hambruna,
pero, además, le da las instrucciones necesarias acerca de las piedras y
minerales que ha de utilizar para que construir santuarios y una
capilla para su señor (¿se refiere a la pirámide?). Esto último ha sido
interpretado por algunos investigadores, como el químico francés
Davidovits, como los “ingredientes” necesarios para la fabricación de
piedras artificiales.
Le hago un regalo a su orilla occidental en la montaña de la oscuridad, y en su montaña este del amanecer”. Zoser al dios Jnum
Para finalizar, Zoser da órdenes a sus súbditos y exige ciertas cosas: “Los campesinos que trabajan sus campos con sus trabajadores, y que traen el agua a sus tierras fértiles, almacenarán su cosecha en su granero, exceptuando lo que adeudan.”
Esta estela es interesante al contrastarla con los siguientes versículos del Génesis de la Biblia:
Génesis 41
15 Y dijo Faraón á José: Yo he tenido un
sueño, y no hay quien lo declare; mas he oído decir de ti, que oyes
sueños para declararlos. 16 Y respondió José á Faraón, diciendo: No está
en mí; Dios será el que responda paz á Faraón. 17 Entonces Faraón dijo á
José: En mi sueño parecíame que estaba á la orilla del río:
29 He aquí vienen siete años de grande
hartura en toda la tierra de Egipto: 30 Y levantarse han tras ellos
siete años de hambre; y toda la hartura será olvidada en la tierra de
Egipto; y el hambre consumirá la tierra;
35 Y junten toda la provisión de estos
buenos años que vienen, y alleguen el trigo bajo la mano de Faraón para
mantenimiento de las ciudades; y guárdenlo. 36 Y esté aquella provisión
en depósito para el país, para los siete años del hambre que serán en la
tierra de Egipto; y el país no perecerá de hambre.
Si seguimos leyendo el Génesis, vemos más correlaciones con la figura de Imhotep:
38 Y dijo Faraón á sus siervos: ¿Hemos de
hallar otro hombre como éste, en quien haya espíritu de Dios? 39 Y dijo
Faraón á José: Pues que Dios te ha hecho saber todo esto, no hay
entendido ni sabio como tú: 40 Tú serás sobre mi casa, y por tu dicho se gobernará todo mi pueblo: solamente en el trono seré yo mayor que tú.
41 Dijo más Faraón á José: He aquí yo te he puesto sobre toda la tierra
de Egipto. 42 Entonces Faraón quitó su anillo de su mano, y púsolo en
la mano de José, é hízole vestir de ropas de lino finísimo, y puso un
collar de oro en su cuello;
¿Es este el motivo por el que la figura
de Imhotep se engrandeció hasta el punto que aparece su nombre en la
propia estatua del faraón? Recordemos el pie de la estatua: “Primero
después del Rey”.
Finalmente la Biblia nos cuenta que José
fue embalsamado en el Génesis 50.26, a la edad de 110 años.
¿Embalsamado? Entiendo que en la Biblia aparece que José fue momificado.
Por lo que su tumba, puede estar aún ahí, en alguna parte esperando ser
encontrada.
Notas:
Traducción de la estela del hambre utilizada: Luis González González
Fuentes: Nachoares.com Reykedish.com
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