AMATISTA- Luz violeta

El violeta es el tono de la vibración espiritual más elevada, de la iniciación al conocimiento místico profundo, de la paz armonizadora, de la calma ante las adversidades y de la dulce alegria del sabio, además de otras muchas cualidades inherentes a los estados de animo a que nos lleva la aproximación a la Fuente; y violetas son los tonos y las transparencias con los que nos saluda la Amatista, la más fascinante de las piedras violetas.
La forma más sencilla de comprender las grandes posibilidades de esta piedra, es agruparlas por sus funciones, por las diferentes formas que tiene de ayudarnos:
Maestra elevadora
La Amatista nos impulsa a percibir el Universo que nos contiene y del que somos parte a través de los ojos del alma, donde la maldad se percibe como un desequilibrio que hay que evitar o trasmutar sin juzgar ni condenar, donde el miedo se cambia en confianza y aceptación y donde reina el amor más puro.
Favorece la elevación espiritual, la intuición, la inspiración y la apertura de la mente a las verdades eternas, facilita la comprensión desde todos los niveles, a todos impulsa y para todos tiene su enseñanza a través de la humildad.
Transmutadora pacificadora
El poderoso campo de vibración de la amatista es capaz de transformar, transmutandolas en energías positivas los patrones de vibración desestabilizadores (negatividad), de limpiar las atmosferas cargadas de pasiones nocivas o malas vibraciones y traer paz, purificando la mente perturbada. Favorece el sueño, y ayuda a tener sueños enriquecedores conscientes o inconscientes.
Armonizadora consoladora
Al facilitar la mirada desde un plano superior podemos comprender el proceso entre el orden y el caos, consolandonos en la perdida de ciertas ilusiones, generando otras más elevadas, o de la marcha de esta vida de los seres queridos, compensándola con la alegría de saber que han ido donde debían, disolviendo angustias, apegos infantiles y enganches egoistas; así, cambia el dolor en una comprensible y dulce tristeza completamente natural.
Protectora
Impide(transmutandola) que la negatividad procedente del exterior impregne a las personas que estan bajo su campo de influencia, y si el tamaño es suficientemente grande, también lo hace en los espacios en los que permanece llenándolos de su equilibrio y buenas vibraciones, por lo tanto es aconsejable como decoración para los lugares donde el trabajo genera tensiones o recelos, en los centros de consulta, tratamientos o masajes donde la gente descarga sus tensiones.
Su energía induce a una convivencia tocada por la comprensión y el amor.

Carlos Obelleiro