Cada vez que te des cuenta de que te has ido al pasado o al futuro,
no te sientas culpable, no te crees problemas por ello. Simplemente,
vuelve al presente. No pasa nada. Simplemente, recupera tu conciencia.
La perderás millones de veces; no te va a salir ahora mismo,
inmediatamente. Puede suceder, pero no puede suceder por tu causa. Es un
modo de conducta fijo desde hace tanto, tantísimo tiempo, que no lo
puedes cambiar de buenas a primeras. Pero no te preocupes, la existencia
no tiene ninguna prisa. La eternidad puede esperar eternamente. No
crees tensiones por ello.
Cada vez que sientas que te has perdido, vuelve; eso es todo.
No te sientas culpable; eso es un truco de la mente, que está otra vez
jugando a sus juegos. No te arrepientas. Simplemente, cuando pienses,
vuelve a lo que estuvieras haciendo.
Si estás tomando un baño, vuelve; si estás comiendo la comida, vuelve; si estás dando un paseo, vuelve.
En el momento en que sientas que no estás aquí y ahora, vuelve…
Simplemente, inocentemente, no crees culpa. Si te sientes culpable, no
has entendido nada.
La eternidad no tiene problemas; todos los problemas existen en el plano horizontal (el ego).
El plano vertical (el Ser) no conoce problemas; es puro gozo, sin nada
de ansiedad, sin nada de angustia, sin ninguna preocupación, sin ninguna
culpa, sin nada.
Sé simple y vuelve.
Te perderás muchas veces, dalo por seguro. Pero no te preocupes por
ello. Así son las cosas. Te perderás muchas veces, pero eso no importa.
No prestes atención al hecho de que te hayas perdido muchas veces,
presta mucha atención al hecho de que te has reincorporado muchas veces.
Que te pierdas es algo natural. Eres humano, has vivido en el plano
horizontal (el ego) durante muchísimas vidas, así que es natural. Lo
estupendo es que has regresado muchas veces. Has hecho lo imposible;
siéntete feliz por ello.
En veinticuatro horas te perderás veinticuatro mil veces, pero te
reincorporarás otras veinticuatro mil veces. Y ahora empieza a funcionar
un nuevo modo. Has regresado un montón de veces; ahora se empieza a
abrir una nueva dimensión, poco a poco.
Cada vez serás más capaz de mantenerte consciente, cada vez serán menos
las idas y venidas. El recorrido de ida y vuelta se irá acortando cada
vez más. Cada vez te olvidarás menos, cada vez te acordarás más; estás
entrando en la vertical (el Ser). De pronto, un día, la horizontal (el
ego) desaparece. La conciencia gana intensidad y la horizontal
desaparece.
A esto es a lo que se refieren el Budismo Zen, el Vedanta y los
hindúes, al decir que este mundo es ilusorio. Porque cuando la
conciencia se hace perfecta, este mundo, este mundo que has creado a
partir de tu mente, simplemente desaparece. Y otro mundo se te revela.
El Maya desaparece, la ilusión desaparece… la ilusión está ahí a causa de tu sueño, de tu inconsciencia.
Si puedes recordar, aunque sea una sola vez, que esto es un sueño, eso
provoca un choque y el sueño se hace pedazos y tú te despiertas.
Este mundo que ves a tu alrededor no es el mundo real.
No es que no exista: sí que existe, pero lo estás viendo a través de un
velo de sueño. Entre tú y él está la inconsciencia, la identificación.
Osho
http://www.formarse.com.ar/
https://www.facebook.com/formarse
https://plus.google.com/+formarse/posts
https://twitter.com/FormarseLibros
No hay comentarios:
Publicar un comentario