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Cuentos para crecer
Esta es una leyenda pagana recogida de la tradición oral que nos revelara un hermoso mensaje,y reconfortara nuestra alma tanto en los momentos de mayor desesperación como en los de máxima euforia de nuestra vida.
Cuenta la leyenda que, en un reino muy lejano, una Reina deseó fabricarse un hermoso anillo. Para ello seleccionó los más nobles materiales y los más hermosos diamantes, pero el objetivo de la soberana no era que la joya fuese ostentosa, ni tuviese un gran valor, sino que en su interior encerrase un mensajeque en, pocas palabras, pudiese reconfortarla en los momentos más difíciles de su vida. De igual forma, cuando el anillo pasase a sus hijos, y despues a los hijos de sus hijos, todos ellos pudiesen recibir laayuda del anillo.
Para encontrar el mensaje más adecuado la Reina reunió en la corte a los hombres más sabios e ilustres, místicos, eruditos y astrólogos que se encerraron en la biblioteca para encontrar algo que, en tres palabras, pudiese suponer un gran consuelo en los momentos de desesperación.
Pero no encontraron nada....
La Reina tenía una gran confianza en la más anciana de las sirvientas de palacio: ella habia sido también sirviente de su madre y, al haber fallecido cuando la Reina era aún muy pequeña, había puesto tan esmero en su cuidado que la consideraba como de la familia. Aparentemente era una mujer ignorante, pero albergaba en su interior una gran sabiduría. Por ello la Reina le consultó su respuesta.
La anciana, con una sonrisa en los labios, le dijo:"....yo no soy sabia ni erudita, pero conozco el mensaje. Hace muchos años me lo entrego un sacerdote que se hospedó en la corte unos dias como invitado de tu madre...." La anciana cogió un diminuto papel y escribío algo, e hizo prometer a la Reina que lo guardaría en el anillo y sólo lo abriría en un momento de gran desesperación, y sólo cuando todos lo demás hubiese fallado.
Así fue. Los momentos duros no se hicieron esperar. Losenemigos del reino atacaron la corte y la Reina perdió sus posesiones. El país estaba invadido y se vió obligada a escapar a caballo entre lágrimas para mantener su vida. Lo había perdido todo y un centenar de soldados la persegia para matarla. Era tan intenso el dolor que no podia ni respirar. Y entonces, recordó el anillo. Desdobló el mensaje y encontró tres hermosas palabras: "ESTO TAMBIÉN PASARÁ". El mensaje llenó de paz el corazón de la soberana y, como si se tratase de un mágico elixir, le dió las fuerzas suficientes para reunir a sus ejércitos y reconquistar el reino.
A los pocos días entraba triunfal en la capital, dónde fue vitoreada por su pueblo entre música y bailes. La Reina se sentia feliz y victoriosa, y entonces la anciana la instó a releer el mensaje. La Reina, sorprendida, preguntó:" ¿Porque en ese momento en el que no puedo ser más feliz?".
La anciana, con una sonrisa, le aseguró, que la magía de ese mensaje estaba en que no sólo la serviría cuando estuviese hundida, sino que también cuando se sintiese orgullosa de si misma,cuando fuese la última y cuando fuese la primera. La Reina obedientemente volvió a leer el mensaje: " ESTO TAMBIÉN PASARÁ", y contempló a la muchedumbre y sus danzas de otra manera, con felicidad y amor pero sin ego ni orgullo. Había comprendido el mensaje. Todas las emociones por más horribles que fuesen o por más placenteras que se presentaran, tarde o temprano terminarian pasando. Formaban parte de la vida como toda la dualidad existente en la naturaleza y de esta manera había que aceptarlas.
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